LOS TENTEMPIÉS LIGEROS AYUDAN A PERDER PESO.

Hacer un tentempié ligero a media mañana y a media tarde -un yogurt con un par de nueces troceadas, una pieza de fruta, dos galletas ricas en fibra, etc.- es un hábito muy saludable y una medida que aumenta la eficacia de las dietas de control de peso. Al comer algo cada tres o cuatro horas nuestro cuerpo entiende que va a disponer de una nueva fuente de energía y, gracias a ello, no ordena activar el "modo ahorro", en el que se consumen menos calorías. Muchas dietas de adelgazamiento dejan de funcionar al cabo de varias semanas debido, precisamente, a que nuestro metabolismo detecta la escasez de alimentos y gasta menos energía. Es entonces, cuando, a pesar de todos los esfuerzos, se produce un estancamiento de la pérdida de peso.